Un eclipse recorre el mundo

Por Joaquín Soler, arquitecto y vocal de la Junta Federal de Unidad Cívica por la República UCR

A mediados de mayo del año 63 a.C. hubo un eclipse de sol en Roma; el cónsul Marco Tulio Cicerón lo consideró como una señal de mal augurio. Fue el presagio de la conjura del senador Catilina para tomar el poder de la República en noviembre. La conjura se atajó rápidamente, pero no predijo un mal mayor: la conjura del fascismo y el asalto al poder en Roma en noviembre de 1922 d.C.

Cuando Benito Mussolini disfrazado de soldado fue interceptado por los partisanos en Dongo, en la carretera del Tirol huyendo hacia Suiza, llevaba un maletín con varios documentos, entre ellos un texto con las reflexiones y las valoraciones que escribió sobre la política de la Segunda República Española.

La sombra de la conspiración fue una amenaza constante para la democracia desde los primeros días de la proclamación de la Republica. Los lideres de Renovación Española, el partido monárquico de José Calvo Sotelo, buscaron apoyo en el régimen fascista italiano, recibieron financiación para organizarse, desestabilizar el gobierno y crear violencia callejera.

          “Esperemos lo que deseamos, pero

         sobrellevemos lo que acontezca”.

          Marco Tulio Cicerón

Después de la victoria del Frente Popular en febrero de 1936, la conspiración de los monárquicos y parte de los militares africanistas consiguieron redactar un contrato de suministro de material militar con el régimen fascista italiano. Necesario para preparar un golpe de estado contra el gobierno de la República. Mussolini estuvo en contra de la Segunda República y de su régimen parlamentario. Quería tener un dominio total en el Mediterráneo e implantar un régimen fascista. España e Italia pertenecían a la Sociedad de Naciones, tenían relaciones comerciales, culturales y diplomáticas con plena normalidad. La conspiración fue un acto de piratería y sabotaje para derrocar un régimen democrático sin ningún motivo.

El apoyo personal de Mussolini como Presidente del Consejo de Ministros y Ministro de la Fuerzas armadas fue crucial para que los contratos de suministro de armas se materializasen con rapidez. Transportando las fuerzas rebeldes africanas a bordo de los aviones italianos. El Corpo de Truppe Volontarie CTV que desembarcó fue de unos 80.000 soldados, bien equipados con material de combate. También vinieron asesores militares, técnicos, pilotos, camiones, tanques y cañones. La Armada italiana persiguió y bombardeó a barcos civiles, buques de guerra y submarinos fieles a la Republica.

          “El verdadero modo de vengarse de

          un enemigo, es no asemejársele.”

          Marco Aurelio

El fascismo fue un régimen cruel que generó mucha violencia física y dolor, primero en Italia y después en todos los territorios que se expandió: Libia, Abisinia, Albania, Grecia y España. Pero este régimen dictatorial se acabó el 28 de abril de 1945, cuando Mussolini fue colgado por los pies en la marquesina de una gasolinera en la piazzale Loreto en Milán. Lo que ha sobrevivido a su legado, es un neoliberalismo global y trasnacional, que es mucho mas peligroso que lo fue el fascismo. Es una tiranía global que no necesita conquistar territorios para imponer su voluntad a todas las zonas del planeta. Está al servicio de grandes corporaciones, de bancos y de fondos de inversión que solo buscan el beneficio de la corporación.

El Duce estaba presente en la vida italiana cada día, en las iconografías, en todos los noticiarios, en la prensa y la radio, recordando como se tenia que sentir y vivir. Las escuadras de las camisas negras se dedicaban a desfilar con  estandartes y música por avenidas y plazas de los pueblos y ciudades.

El poder actualmente es silencioso: no tiene rostro, no tiene patria ni bandera, es reaccionario, autoritario y corrupto, porque corrompe todas las voluntades. Este poder en la sombra ejerce una violencia invisible y cruel. Destruyendo y disminuyendo el estado de bien estar. Deslocalizando las empresas, las fabricas y los centros de producción. Necesita destruir las estructuras del estado y su fortaleza, que es la defensa de los ciudadanos, para alcanzar el poder sin lema y sin programa.

          “Las condiciones indispensables para lograrlo eran que el fascismo

          no tuviese programas definidos, ni ideas claras, ni objetivos precisos.”

          Curzio Malaparte  “Muss. Retrato de un dictador” 1931.

Los principales factores, entre otros, que hicieron que enraizará el fascismo en Italia fueron: la debilidad del estado, la amenaza de una revolución comunista como la soviética y la frustración ocasionada por la primera guerra mundial. Hoy en día el fascismo no está visible en las calles y plazas, aunque los tres factores estén actuando en la sociedad. La memoria de los hombres y mujeres es corta y nos gusta olvidarnos con rapidez.

El lema de la libertad se ha usado contra el miedo: de un gobierno bolivariano y social-comunista, la frustración y la angustia ocasionada por la pandemia de la COVID-19 y con una administración regional débil. Implantando una política basada en: falta de atención a la sanidad publica, malversación del patrimonio público, privatizando y externalizando los servicios públicos y minusvalorando la enseñanza publica. Todas estas medidas se han hecho en nombre de la libertad. El fascismo no está visible en las calles y plazas, pero está presente en el gobierno de Madrid.

          «Reír nos hizo invencibles.

          No como los que siempre ganan,

sino como aquellos que no se rinden».
Frida Kahlo

Salud y República a todos.   

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